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Amaban el peligro, odiaban el trabajo y ambicionaban la riqueza de los demás. Allí donde navegaban buques con riquezas, había piratas dispuestos a tomarlos por la fuerza... ésa siempre fue la premisa.

jueves, 17 de junio de 2010


Corsario

( latín cursus, es decir, "carrera" )

Era el nombre que se concedía a los navegantes que, en virtud del permiso concedido por un gobierno en una carta de marca o patente de corso, capturaban y saqueaban el tráfico mercante de las naciones enemigas de ese gobierno.








Cartas de corso:

Decreto que les autorizaba que su gente ultrapasara fronteras para en donde ultrajar o destruir barcos y flotas enemigas.

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